¿Cuáles son algunos incidentes, travesuras o viajes que hicieron que su vida en la universidad de ingeniería valiera la pena de recordar?

Esta es la cosa más divertida que sucedió durante mi segundo año en la escuela de ingeniería. Era exámenes de la semana y al día siguiente era Matemáticas III. No tuve un corte de cabello adecuado en los últimos meses y mi cabello se había vuelto ridículamente largo y me irritaba mucho. Desde el día siguiente teníamos un papel importante, no podía permitirme un corte de cabello y perder el tiempo, así que le presto un recortador de un amigo y le pido a otro amigo que me ayude a cortar el pelo cerca de la oreja, ya que estaba cubriendo Mis oídos completamente.

Era una tarea pequeña y debería haberse hecho en pocos minutos, pero la ley de Murphy había planeado enseñarme una lección. Él (mi amigo) recibió una llamada de su novia y me pidió que esperara unos minutos. Me impacienté e intenté cortarme mis propios bollos con mi propia mano y el desastre sucedió. El recortador se atoró en mi cabello y, mientras trataba de sacarlo, saqué un gran trozo de cabello de mi lado izquierdo. Lo llamé para pedirle ayuda y él comenzó a reírse mucho y trató de ajustarlo haciendo lo mismo con mi lado derecho y se volvió desigual.

Pronto llamó a todos mis amigos y todos se turnaron para ayudarme, pero el desastre ya estaba hecho. Todos se estaban riendo de mi horrible corte de pelo y luego mi buen amigo (a quien pedí que ayudara en primer lugar) se compadeció, hizo lo impensable y se afeitó el pelo. Ya lo tienes, me puse BALD y un gran trozo de pelo estaba tirado en el suelo.

El incidente continuó. El director de nuestro albergue llegó a la escena mientras todos los niños gritaban y se reían de mí. Al verlo todos corrimos hacia nuestro baño (ya que estaba cerca). Un niño que no podía correr tomó la podadora y actuó como si se estuviera afeitando, pero olvidó que enormes montones de cabello todavía estaban en el suelo. El director comenzó a gritarle y pudimos detener nuestra risa.

Al día siguiente, el director se tomó el tiempo de escribir el incidente en nuestro tablón de anuncios, en el que se explicaban las travesuras cometidas por nosotros. Fue un infierno de una semana para todos nosotros. No sabía si debería estar enojada con ellos o reírme de mí misma. Elegí el último. Aún así este incidente nos hace reírnos de nosotros mismos.

Voy a hacer esa ‘travesura’ hoy mismo.
Cruzaré la pared rota de mi campus universitario para pasar un rato con amigos, ¡ya que me negaron un pase de un día! 🙂