Esto me sucede cuando no he tomado las medidas adecuadas para llegar a un estado de atención relajada. Los pasos que me llevan “en la zona”:
- El hambre saciaba, pero no incómodamente llena.
- Hidratado.
- Borrar el campo de visión. Saque todo del escritorio, excepto un bolígrafo y un cuaderno. Si es una lectura electrónica, desactive el correo electrónico, la mensajería, las aplicaciones, etc. Si la pantalla está llena de publicidad irrelevante, enlaces, etc., imprima el texto y trabaje en papel. Si está sentado en una silla con un libro, ordene la habitación.
- Apagar la música. Si está tratando de ahogar las distracciones, use ruido blanco, sonidos de la naturaleza o, a lo sumo, música instrumental tranquila. No le des competencia a tu cerebro por procesar palabras de dos fuentes.
- Si no es ficción, lea los encabezados de prefacio / introducción / párrafos iniciales / conclusión / sección en ese orden. Esto pone mi mente en el contexto. Luego proceda de nuevo desde el principio hasta las conclusiones, sin tomar notas ni distracciones del flujo del texto. Luego, vuelva a leerlo haciendo notas de márgenes o resaltando o anotando notas en papel. Luego haz un resumen. Si es ficción, vuelva a leer las últimas páginas del capítulo anterior para reorientar en la trama y el estilo del autor.
- Si no hago ningún progreso, me detengo y voy a buscar una pequeña tarea sin sentido mientras hago que mi mente esté al tanto del material.
- Si estoy trabajando con el material técnico que necesito retener, las notas que escribo a mano, los ensayos breves, etc. en papel me ayudan a retener la información de manera diferente que si la escribiera. Creo que eso es porque escribir es una actividad del cerebro izquierdo + cerebro derecho. La escritura a mano también es más lenta que escribir, lo que te obliga a mejorar tu forma de pensar, lo que te permite profundizar y encontrar conexiones con otros conocimientos. A menudo vuelvo más o menos un día después y escribo mis notas y mi resumen en una revista, lo que me ayuda a recordar la información y a grabarla de manera diferente.
Cuando terminé el proceso, leí brevemente el material en mi preparación para formar un contexto, sin distracciones de principio a fin, lo revisé en detalle para tomar notas y redactar un resumen, y revisarlo una vez más o menos un día después, formalizo mis notas y mi resumen para asegurar que la información haya pasado de corto a largo plazo a la memoria. En este punto, sé si he internalizado la información y, si no, vuelva atrás y comience de nuevo.