Este es un tema demasiado grande para responder de manera integral, pero entre algunos de los más grandes se encuentran:
- “Líneas de puntos”: personas que se enganchan a su gente y las empujan en otras direcciones debido a su atracción política.
- “Backloading”: las personas se dan cuenta de que hay recursos en su proyecto y una vez que ven que tiene un historial de éxito, intentan cargar sus agendas en su equipo de proyecto, ya sea relacionado o no.
- Recursos parciales: les dijiste lo que necesitabas para hacer el proyecto, te dieron las personas, pero no los recursos (por ejemplo, proyectos con personal completo sin computadoras). Esto sucede mucho más de lo que a la gente le gusta reconocer.
- Crisis personales: la vida sucede, un buen supervisor es a veces un buen terapeuta, pero a veces las personas que atraviesan situaciones de mala vida pueden volverse tóxicas para los equipos. Puede ofrecer todos los niveles de soporte y no los ayudará.
- Una vez mordido, dos veces tímido: un supervisor se ocupa de todas las cicatrices infligidas a un empleado por cada supervisor malo anterior a ellas. Muchos empleados provienen de “Madre, ¿puedo?” culturas donde sienten que tienen que pedir permiso para todo, y su responsabilidad termina con pedir permiso. Eso deja una gran brecha en términos de construir un equipo motivado. Creo que a algunos supervisores les gusta ser el cuello de botella para cada decisión.