Debido a la dificultad de buscar un creador físico corporal del mundo físico.
Incluso según la mejor de las teorías científicas, el big bang, el universo se originó a partir de una masa muy densa pero finita.
Es ilógico que un creador sea algún otro ser físico finito. Sin embargo, también es ilógico que un creador físico (como cualquier otra cosa física) pueda ser infinito.
Entonces, para entender al Dios Único, es necesario entender que el Creador NO es un ser físico.
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Y esto requiere imaginar el concepto de un ser único, que todo lo abarca, pero unificado, que está más allá de todas las dimensiones de nuestros conceptos físicos.
Él es la única singularidad, sin divisiones posibles, e infinito en todos los sentidos, abarcando todo, sin embargo, todas las cosas son una dentro de Él.
En la Biblia judía, se le llama YHWH, que significa aproximadamente “dador de existencia”. Su unidad, algo difícil de entender para la gente, significa que no hay división entre Su esencia, Sus acciones y Su Nombre (que incluye la creación, que está unificada dentro de Él a pesar de su particularidad y divisiones aparentes para nuestros sentidos).
El objetivo de entender todo esto es que todos somos parte de Dios. La creación ocultaba Su emanación de tal manera y hasta cierto punto, para permitir que el universo y nuestro ser físico, “tengan un espacio” que Él no llena por completo, así como el libre albedrío que se deriva de el alma que respiró en nosotros (desde su esencia).
Y después de todo esto dicho y digerido, sigue siendo cierto que todavía solo hay un Dios no físico indivisible que nos contiene a todos, y todo está unificado dentro de Él.