Puedes defenderte de los comentarios de los fanáticos, o de aquellos que obstinadamente, irracionalmente, de manera injusta o intolerante atacan a otras personas e ideas, al darte cuenta de que están declarando públicamente su propia debilidad.
Para los propósitos de esta discusión, hay dos tipos de personas: las que eligen crecer, aprender, madurar y desarrollarse y las que eligen simplemente empujar a los demás para que parezcan más altos. El fanático, al elegir enfocarse en las fallas percibidas de los demás, está admitiendo su propio fracaso o falta de voluntad para desarrollarse y crecer por su cuenta.
La ignorancia deliberada del fanático generalmente no cederá a la persuasión o la razón, aunque algunas situaciones extremas pueden justificar una respuesta.
Consuélese con el hecho de que sus elecciones los mantendrán encarcelados, incapaces de crecer o desarrollarse, mientras que sus elecciones le permitirán continuar madurando y evolucionando.