Cuando nos enfrentamos a una pregunta de qué conciencia le dice a uno que haga y qué mente quiere que haga … ¿Qué debe hacer uno?

Primero que nada no hay ‘mente’ y ‘conciencia’. Es solo un único software complejo que pesa dos opciones diferentes. Una opción tiene una ganancia a corto plazo pero (quizás) arrepentimiento a largo plazo, la otra tiene arrepentimiento a corto plazo, pero tal vez una ganancia a largo plazo. Lo ‘a largo plazo’ es donde las cosas se vuelven confusas. Es extrapolar el pasado al futuro … y eso es a largo plazo.

Dependiendo de cómo hayan resultado las decisiones pasadas, este software intentará tomar la decisión más ‘rentable’ para el futuro.

La decisión que tome no tiene relación con su felicidad moral, ética o social … solo tiene relación con su felicidad. Largo plazo o corto plazo.

Solo toma una decisión que te haga feliz … si te sientes feliz, entonces está bien. Incluso si es la decisión más ‘malvada’. Pero trata de buscar la felicidad a largo plazo. Tiene sentido.

Y sí, no tengas miedo de estar “equivocado”. “Equivocado” es solo algo que te pone triste.

Ir con la mente asegura tu supervivencia, que es impermanente.

Ir con la conciencia puede meterte en problemas a corto plazo, pero te hará más fuerte para llevar una vida mucho mejor, que puede llevarte más allá de la supervivencia mundana.