A2A
Ahora vivo más en el presente que nunca antes, lo cual es algo bueno. Sin embargo, todavía tengo problemas para dejar el pasado, aunque no es más fácil preocuparme por el futuro.
Creo que mi desafío con el pasado es que me ha dolido, en algunos casos bastante mal, e incluso cuando el dolor se ha curado en gran medida, o al menos ha costado, es difícil evitar volver a él, para ganar simpatía por nuestro difícil, para explicar por qué somos lo que somos, para hacernos sentir mejor acerca de dónde hemos terminado. Por supuesto, al igual que una costra física o una cicatriz, cuanto más la escojamos, más tiempo tarda en sanar y peor son los restos en su impacto en nuestro presente.
El desafío con el futuro es que está en nuestras manos, y lo que hacemos hoy impacta cómo será nuestro mañana. Pero esa responsabilidad puede ser difícil de aceptar, y puede ser mucho más fácil preocuparse por ello, evitando y evadiendo la responsabilidad que tenemos de crear nuestro futuro.
- ¿Cuál es la fórmula del éxito?
- ¿Puedes ser irreligioso y aún creer en Dios?
- ¿Compartir el conocimiento es bueno o malo?
- Si tuviera la opción, ¿qué elegiría, inteligencia o suerte?
- ¿Cómo definirías tu vida pasada en una sola palabra?
Vivir la vida en el presente es un desafío continuo para mí para aceptar y superar.