Hubo una publicación bastante famosa en 2011 sobre ese tema: Efectos de Google en la memoria: Consecuencias cognitivas de tener información en nuestras manos (espejo: http://www.wjh.harvard.edu/~wegn…)
La llegada de Internet, con sofisticados motores de búsqueda algorítmicos, ha hecho que acceder a la información sea tan fácil como levantar un dedo. Ya no tenemos que hacer esfuerzos costosos para encontrar las cosas que queremos. Podemos “buscar” al viejo compañero de clase, encontrar artículos en línea o buscar al actor que estaba en la punta de la lengua. Los resultados de cuatro estudios sugieren que cuando se enfrentan a preguntas difíciles, las personas están preparadas para pensar en las computadoras y que cuando las personas esperan tener acceso a la información en el futuro, tienen tasas más bajas de recuperación de la información en sí misma y, en cambio, mejor información sobre dónde acceder. eso. Internet se ha convertido en una forma primaria de memoria externa o transactiva, donde la información se almacena colectivamente fuera de nosotros.
El estudio ha sido comentado y criticado en los periódicos:
- La mente extendida – cómo Google afecta nuestros recuerdos
- El ‘efecto Google’ desmentido: los cambios en la memoria humana no comenzaron con los motores de búsqueda – Diario del motor de búsqueda
- ¿Está Google realmente arruinando nuestra memoria? | TIME.com
Puede encontrar en Google Scholar los documentos que citaron el estudio, algunos de ellos pueden ser de interés.
- ¿En qué se diferencia alguien con el cerebro de una memoria fotográfica del cerebro de la mayoría de las personas?
- ¿Sigue habiendo la estructura física para un recuerdo olvidado? ¿Se puede recuperar?
- ¿Los cerebros humanos almacenan información en binario?
- ¿Cuál es la vida media de una segunda lengua?
- ¿Se correlacionan la memoria y la inteligencia?