Su acto de ayudar debe depender de varios factores. Haga las siguientes preguntas antes de ayudar a alguien.
1: ¿Quién está pidiendo ayuda?
- Si te gusta la persona, ayúdala.
- Si no te gusta la persona, da alguna excusa para que no te vuelva a pedir ayuda.
2: ¿Cuál es el tipo de ayuda?
- Si ayudar significa dedicar mucho tiempo mientras tiene su propio trabajo pendiente, es mejor evitarlo.
- Si puedes ayudar fácilmente sin perder mucho tiempo, adelante.
3: ¿Con qué frecuencia se pide ayuda?
- ¿Es posible que la vida en la tierra fuera planeada por una especie avanzada de un planeta moribundo?
- ¿Cuál es tu verdadera historia en la que nadie podría creer?
- Como ingeniero civil, ¿qué condición difícil enfrentas en la vida y cómo se resuelve?
- ¿Qué significa que la vida es rápida en las ciudades metropolitanas?
- ¿Qué significa la vida en la India?
- Si la persona tiene la costumbre de hacer su trabajo simplemente pidiendo ayuda a los demás, no lo haga. Déjalo pararse sobre sus propios pies.
- Si él pide ayuda de vez en cuando solo en casos de emergencia, adelante.
4: ¿Qué tan útil es esa persona?
- Si la persona que solicita ayuda es útil, hágalo con prioridad, tratándolo como una inversión, ya que él también lo ayudará cuando lo necesite.
- Si es poco probable que la persona le devuelva el favor cuando necesite ayuda, no pierda el tiempo.
Es importante administrar bien su tiempo y energía porque ambos recursos son limitados.
No trate la ayuda como un desperdicio porque si invierte su ‘ayuda’ correctamente, recibirá ayuda oportuna cuando más la necesite.
Desarrolla el hábito de aplicar tu mente antes de ayudar a alguien.
Hazle saber a la otra persona que tienes mejores cosas que hacer y que tu tiempo es valioso.
Es fácil ayudar. Pero ayudar a la persona correcta en el momento correcto de la manera correcta no es fácil.