¿Cómo se compara una tutela con un poder notarial?

En general, se establece una tutela mediante una orden judicial cuando una persona no puede manejar sus asuntos financieros por algún motivo. Esto podría ser edad, demencia, otras enfermedades, etc. El curador debe manejar los asuntos financieros en el mejor interés de la persona protegida y se le puede solicitar que informe a la corte periódicamente.

De nuevo, en términos generales, un poder notarial le otorga a una persona (el abogado de hecho) la autoridad para tomar ciertas acciones en nombre de otra persona. Estos pueden incluir el poder de contratar, vender propiedades, emitir cheques, cobrar cheques, obtener registros médicos u otros registros confidenciales, entre otros. El poder se puede otorgar incluso si la persona que recibe puede manejar sus asuntos y no requiere una orden judicial. También hay poderes legales para el cuidado de la salud que pueden crearse para otorgar a una persona la autoridad para tomar las decisiones médicas de un paciente si el paciente no puede hacerlo.