¿Es posible explicar el conocimiento previo del resultado de un evento fortuito, como lanzar un juego de dados?

¿Está realmente determinado por la casualidad? Digamos que en este momento estás viendo una película. Ahora tienes que ir al baño. Esto se debe a que las bebidas que ha consumido pasan por su sistema y le llenan la vejiga. Por lo tanto, el evento que emprendió en el pasado ha provocado una cascada de eventos en el futuro. Ahora ese futuro ha llegado a ser tu presente. Este fenómeno de causa y efecto ocurre a nuestro alrededor todo el tiempo, y lo que pensamos que es aleatorio no lo es. Entonces, como todo se hace en el ahora, diferenciamos el ahora como tiempos pasados, presentes y futuros. Así que el pasado ahora, el presente ahora y el futuro ahora. Entonces tu necesidad de ir al baño es tu condición actual. Estar en el baño es tu experiencia futura. Pero esa experiencia podría cambiar sin su conocimiento. Porque en lugar de estar en el baño, podrías tropezar, caer y romperte la pierna. Este evento podría hacer que te manches a ti mismo. Se podría decir que este accidente ocurrió por casualidad, pero como todos los ingredientes necesarios están ahí, entonces es solo cuestión de probabilidad.

Lo que esto significa es que dado que todos los eventos se realizan en el ahora, entonces lo único que falta es la posición. El lugar en el que se encuentre en la secuencia de tiempo dicta los eventos que experimentará. Algunas personas experimentan deja vu. Una sensación de que han estado allí antes. Es como si tu mente estuviera recogiendo la energía de eventos futuros. Lo gracioso es que, aunque podamos tener visiones de eventos futuros, no podemos traducirnos a un estado futuro sin pasar por los eventos adjuntos a ellos. Pero podemos ser capaces de conectarnos con nuestro futuro ahora sin estar allí en nuestra situación actual.

Pero incluso si pudiéramos interactuar con eventos futuros, no podemos cambiarlos. Porque si pudiéramos, ¿entiendes lo que pasaría? Tendríamos el control de todo en todas partes. Si no nos gusta algo, simplemente podríamos cambiarlo. ¿Ese matón que te acosó en la escuela? Acaba de ser atropellado por un autobús. Mucha gente no cree en Dios. Pero si tuvieras este poder, serías Dios. Esta no capacidad para cambiar eventos se aplica también al pasado, ya que pasado presente y futuro son uno.

Esto se hace porque gran parte de lo que sucede está predeterminado con un libre albedrío posible, por lo que es como ver una película, donde ya se han producido múltiples variaciones.