¿Por qué a los introvertidos no les gusta el socialismo?

¿Por qué a los introvertidos no les gusta el socialismo?

Esta pregunta contiene la falsa suposición de que:

  • Los introvertidos son todos iguales
  • Los introvertidos no son personas sociales.

En primer lugar, volvamos a la definición de Introvertido.

Hay mucha definición de introvertido e introversión. Pero mis favoritas son de Susan Cain:

Los introvertidos son personas que prefieren ambientes más tranquilos y de estimulación mínima. La clave está en la estimulación: los extrovertidos se sienten mejor y ansían un alto grado de estimulación. Para los introvertidos, la zona óptima es mucho más baja.

En pocas palabras, los extrovertidos recargan su energía y se sienten más vivos cuando están cerca de mucha gente. Mientras que los introvertidos se sienten más vivos cuando están solos o con personas que conocen bien.

La introversión es diferente de ser tímido o no socialmente activo. Alguien podría ser un introvertido, pero le gusta socializar. Al igual que alguien podría ser extrovertido pero no realmente social debido al miedo al juicio social. Y lamentablemente, estas personas a menudo son confundidas con introvertidas.

Así que la suposición de que a los introvertidos les disgusta el socialismo es a menudo falsa y unilateral. A los introvertidos no les disgusta el socialismo. Probablemente hay algunos de los introvertidos a quienes no les gusta el socialismo como lo describen, pero la mayoría si los introvertidos no son así en absoluto. Los introvertidos pueden ser muy sociables y pueden sentirse muy cómodos estando cerca de personas. La diferencia fue que, si bien los extrovertidos pueden continuar toda la noche y socializar, los introvertidos necesitan algo de tiempo para recargar su energía (por lo que a menudo se esconden en el baño durante la fiesta). Y mientras que los extrovertidos pueden fácilmente ser cómodos y amistosos con las personas que acaban de conocer, los introvertidos a menudo necesitan algo de tiempo para conocer a las nuevas personas antes de ser amistosos.

También somos humanos (animales “sociales”).

Así que por favor nunca supongamos que no nos gusta el socialismo.

Nos gusta socializar con la gente. La forma en que socializamos puede ser diferente.

Por ejemplo, en lugar de tener una fiesta con una pandilla de amigos que apenas conocemos, preferimos tomar una taza de café con uno o dos amigos muy cercanos. Y créanme que muchas discusiones interesantes ocurren en esa taza de café y llegamos a saber mucho sobre esas personas.

Y creo que ese es el motivo de la socialización.

Gracias 🙂

No nos disgusta el socialismo, nos disgusta la socialización. Y tampoco todos lo odiamos, solo lo hacen los que son demasiado introvertidos.