Haz esto en dos pasos:
- Escribe cada idea que puedas pensar. Willy-nilly. Ninguna organización. Llena la página con ideas en cualquier orden.
- Organiza lo que has dejado. ¿Cómo? Hágase una serie de preguntas, comenzando con esta: “¿Qué es lo primero que un lector debe saber sobre este tema?” Luego, “¿Qué es lo próximo que necesitan saber?” Continúe hasta que haya identificado lo último que Necesito saber, lo menos importante.
Al comienzo de tu pieza, plantea la pregunta crucial. “¿Vale la pena el horario de verano?”, Por ejemplo, o “¿Es real el cambio climático?” O lo que sea. Luego diga: “Examinemos los argumentos a favor y en contra y los hechos, como se conocen”.
Al escribir, se el lector no el escritor. Pregúntese qué preguntas tendría como lector y responda, como escritor. Haga esto en orden de importancia.
Cuando haya terminado, agregue un párrafo final, como un abogado defensor que habla con el jurado. “En resumen, me he propuesto demostrar que el horario de verano es una idea estúpida y creo que he presentado un caso incuestionable en su contra”.