Bueno, amigo mío, aunque debo preguntarte qué quieres decir con conmovido. Es movido para tomar acción positiva o sacudido por el shock. Vamos a discutir ambos.
A menudo usamos la frase “la amarga verdad”. Esto puede muy bien ser suficiente. Dado que, todos nosotros queremos que nuestras vidas sean dulces, la amarga verdad tiene que movernos a actuar para cambiar lo amargo. Mientras que la verdad sigue siendo la misma.
Consideremos lo que sigue aquí, sacudido por la verdad. Ahora, si examinas detenidamente, no es la verdad lo que te ha sacudido o te ha decepcionado. De hecho, es nuestra concepción de la verdad la que causa angustia en nosotros. Pongamos un ejemplo, digamos que a un chico le gustan las chicas, si descubre que no le gusta, él quedará devastado. Interpretamos esta situación para decir que él estaba devastado al descubrir que a ella no le gusta. Pero mira, esta devastación fue el resultado de su concepción de que a ella también le gusta. Asumió eso, lo soñó y lo creyó.
En lo que se refiere a la verdad, no cambia y siempre permanece igual. Somos nosotros los que tenemos diferentes percepciones e interpretaciones de la verdad.
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Para una persona que toma la vida como y cuando viene y lleva la vida sin suposiciones, expectativas y juicios. La verdad no lo conmueve ni lo decepciona porque se acerca a la verdad por curiosidad y no por juicio.