Cómo acostumbrarse a leer un libro a la semana.

¡Al no querer leer un libro a la semana!

Lo intenté y no me funcionó bien. Era como la tarea. Necesitaba leer un libro por semana, así que, al igual que la tarea, pensé: “Tengo mucho tiempo, lo haré más tarde”. Pero, a diferencia de la tarea, la retroalimentación es inmediata. Podría hacer mi tarea fácilmente la noche anterior. Si era bueno o incompleto se debía averiguar. Donde, como con el libro, ya tienes el número de páginas, para que sepas cuándo termina.

El punto es, los plazos no funcionan. Especialmente en esta situación. ¿Por qué quieres leer un libro a la semana? Hasta ahora no lo has hecho y, sin embargo, lo has hecho bien en la vida. Nadie te recompensará con nada si logras leer un libro a la semana. Entonces, ¿por qué escogiste al azar un libro a la semana en lugar de un libro al mes, o un libro cada tres días? No hay razón real, ¿verdad?

¡Así que olvídate de ese plazo!

Ahora, solo lee cada minuto que tengas tiempo libre! Y, siempre, siempre deja caer el libro si lo odias.

Con esos dos pasos, corre el peligro real de leer más de un libro a la semana, lo cual, si se tratara de la tarea, sería degradado por hacer más de lo que se le pedía.

Además, hay tres formatos de libros sorprendentes: papel, digital, audio. Algunos profesores no aceptarían tu tarea si es digital o, Dios no lo quiera, audio, pero al diablo con ellos. Estás leyendo para tu propia alegría. Cualquier otra cosa es una ventaja.